El acero cromado es un tipo de acabado que puede ser empleado en dicho material y que, debido a su extraordinaria combinación de propiedades físicas y químicas, es considerablemente utilizado en diversas producciones. Se trata de una aleación de acero con una capa de cromo, lo cual se traduce en una serie de características únicas y beneficiosas.
Y es que, debido a su alta resistencia frente a la corrosión, maleabilidad y atractivo estético, el acero cromado confiere a este material un acabado versátil con un alto valor en la industria. Estas propiedades lo convierten en una de las opciones preferidas de cara a ser empleado en una amplia gama de sectores. A lo largo de este post, explicaremos en detalle estas inigualables propiedades.
¿Qué es el acero cromado?
El acero, material principalmente protagonista con el que desde Jansen fabricamos todos nuestros perfiles para puertas, ventanas, fachadas y lucernarios, puede adquirir diferentes acabados. El cromado le confiere una apariencia metálica y de color similar a la combinación de los metales empleados en la mezcla, algo que lo hace ideal para una amplia gama de aplicaciones industriales y de consumo.
Es conocido por su alta capacidad a la hora de resistir la oxidación, la corrosión y la decoloración. Esto se debe a que este tipo de acero cuenta con un acabado que se basa en una capa de cromo que lo protege de la exposición al aire y la humedad, característica que lo convierte en un material perfecto para su uso en materiales que necesitan resistir el paso del tiempo y el uso frecuente, tal y como puede suceder con nuestras ventanas del hogar.
Además de su alta resistencia a la corrosión y la oxidación, el acero cromado también es conocido por ser altamente resistente a los arañazos y abolladuras provocados por cualquier tipo de golpe. Esto lo convierte en un material ideal para su uso en una amplia gama de productos, desde cubiertos y herramientas de cocina, hasta materiales de construcción y automóviles.
En términos de fabricación, el cromado proporciona al acero una fácil manejabilidad y moldeabilidad. Es utilizado en diversas formas, tales como láminas de metal, barras, tubos y perfiles, algo que permite su utilización en múltiples sectores industriales, por ejemplo, la construcción, la ingeniería y la fabricación de muebles.
En el ámbito de la estética, el acero cromado es considerado un material moderno y elegante, lo que le permite ser ampliamente utilizado en productos para el hogar y electrónicos, tales como en ventanas y marcos de puertas.
Propiedades del acero cromado. ¡Conócelas!
El acero cromado es un material altamente valorado en la industria por sus características únicas y beneficiosas. Debido a sus propiedades útiles y su durabilidad, el acero cromado tiene una amplia variedad de aplicaciones.
A continuación, desde Jansen te detallamos las propiedades que debes tener en cuenta para elegir el acero cromado como material en las ventanas de tu hogar.
Resistencia a la corrosión
El acero cromado se distingue de otros tipos de acero por su alta capacidad para resistir a la corrosión. El cromo es un elemento químico que se añade a la aleación del acero para hacer que este sea más resistente a la oxidación y al desgaste.
Al igual que otros tipos de acabado, el cromado en el acero está compuesto principalmente por hierro. La cantidad de cromo en la aleación puede variar desde el 10% al 12%. El acero cromado también puede contener otros elementos como el níquel, el molibdeno y el vanadio para mejorar sus propiedades físicas y mecánicas.
Brillo
El brillo en el acero cromado es una de las características más notables de este acabado. La capa de cromo en la superficie del acero le da un acabado brillante que lo hace ideal para su uso en aplicaciones en las que se requiere tanto la resistencia a la corrosión, como la estética.
Aplicaciones
Los componentes mecánicos y estructuras que requieren resistencia al calor, a la corrosión y a la fatiga suelen estar hechos con acero cromado. Además, se utiliza comúnmente en casos en los que se requiere higiene y limpieza, como en aquellos dedicados a la fabricación de equipos médicos y alimentarios. El brillo y la resistencia a los arañazos que tiene también lo hacen ideal para aplicaciones estéticas, como en la producción de accesorios decorativos y de muebles de alta calidad.
¡Descubre todas las ventajas del acero cromado!
El acero cromado tiene multitud de ventajas debido al gran abanico de propiedades que presenta. Este tipo de acabado es utilizado en diferentes ámbitos, tal y como hemos mencionado anteriormente, gracias a sus amplias ventajas. Desde Jansen te informamos de aquellas con más relevancia.
Material duradero y resistente
Una de las ventajas más notables del acero cromado es su resistencia a la corrosión y oxidación. La capa protectora de cromo que se forma en la superficie del acero lo hace altamente resistente a la corrosión en ambientes difíciles y húmedos. Además, esta capa de cromo también es resistente a los arañazos y la abrasión, lo que significa que el material es altamente duradero y resistente al desgaste.
Capacidad para ser rectificado
Otra ventaja del acero cromado es su capacidad para ser rectificado y pulido para mejorar aún más su acabado. La maleabilidad del acero cromado permite una mayor precisión en las aplicaciones en las que se utiliza. Esto lo hace ideal para la producción de piezas de maquinaria y herramientas en las que se requiere un mayor nivel de precisión.
Ventaja estética
El brillo en el acero cromado también es una ventaja estética importante. La capa de cromo en la superficie del acero da al material un acabado brillante y atractivo que lo hace adecuado para aplicaciones en la producción de piezas decorativas y accesorios para el hogar.
¿Cómo quitar el óxido del acero cromado?
El cómo quitar el óxido del acero cromado es una pregunta bastante recurrente. Existen diferentes formas de llevarlo a cabo, por lo que desde Jansen te dejamos tres opciones para que elijas la que mejor se adapte a tus necesidades.
- Con ácidos suaves. Este método requiere de ácidos suaves como puede ser el jugo de un limón, un refresco de cola o cualquier otro ácido similar. El primer paso consiste en la limpieza de la zona a tratar. A continuación, se procede al remojo y la cubierta del cromo con el ácido, el cual debe permanecer 15 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, restregamos el óxido para quitarlo. Por último, retira el agua con jabón y seca la superficie.
- Con aceite o cera para cromo. El primer paso es común en todos los métodos de limpieza de óxido: limpieza del cromo con agua jabonosa. Posteriormente, se debe aplicar aceite o cera en la zona oxidada. Para ello, utilizaremos una esponja fina con el objetivo de restregar por la zona a tratar. Para finalizar, enjuagamos con agua y la secamos.
En definitiva con todo lo mencionado a lo largo del artículo, el uso del acero cromado como acabado elegido para las ventanas de tu hogar es una apuesta segura. Su resistencia a la corrosión, su alto brillo y la variedad de casos en los que puede aplicarse, hacen que el acero cromado se convierta en una de las alternativas más empleadas. Si tienes algún tipo de duda, ¡ponte en contacto con nosotros! Contamos con un equipo repleto de profesionales que estará encantado de atenderte y resolver cualquier consulta que pueda surgirte.
